Una de las actividades más populares del deporte outdoor son los descensos en aguas bravas en rafting. La disponibilidad de ríos como el Noguera Pallaresa o el Gállego en el Pirineo convierten a España en un destino prioritario para los amantes de esta disciplina.
Con la llegada de la pandemia, las actividades outdoor o al aire libre han experimentado un boom entre los consumidores y han aprovechado la oportunidad para consolidarse como actividad de naturaleza de referencia de una parte de la población. Entre ellos destaca el rafting, una de las prácticas deportivas que más posibilidades tiene en España por su geografía. Gracias a la riqueza fluvial del territorio, los amantes de la aventura pueden disfrutar de todo tipo de descensos en aguas bravas.
Las opciones son muy variadas en función del segmento del río, de la dificultad del descenso y de la experiencia de los clientes. Se trata de una actividad dirigida a todos los públicos, desde los más inexpertos que nunca se han subido a una embarcación de estas características, hasta los más duchos en la materia. Especialmente triunfan las actividades y deportes de aventura con el rafting, barranquismo, kayak en familia y con amigos, pues cada actividad está especialmente diseñada para la capacidad de personas que forman parte del grupo, lo que permite realizar la actividad de una forma cómoda, organizada y segura. Esta es una de las principales razones que dotan de gran atractivo y popularidad a estas disciplinas.
Por otro lado, cabe mencionar que también existe una diferenciación en lo relativo a la distancia del trayecto efectuado. Es posible realizar descensos de pocos kilómetros destinados a los iniciados en esta disciplina o grandes excursiones de hasta 52 km durante todo un día con varias paradas para comer y descansar. Dirigido a grupos en familia, con niños o a apasionados de la aventura y del deporte en entornos de naturaleza, el rafting se convierte en una de las actividades al aire libre disponibles para todos los públicos.
Otra de las opciones que ofrece el rafting es la de disponer de la embarcación en exclusividad. “En enero de 2020 decidimos ofrecer actividades un poco más exclusivas y lo hicimos con el rafting. Antes bajaban con desconocidos, y decidimos ofrecer la posibilidad de contratar la barca entera, no una plaza. Eso lo hicimos antes de la pandemia y nos ha dado muy buenos resultados ”, señala Àngel Panicello, responsable de RocRoi en Vilanova i la Geltrú, una de las empresas líderes del sur de Europa en la organización de experiencias deportivas outdoor.
De hecho, el rafting ha hecho de la necesidad virtud al presentarse como un deporte al aire libre que se puede hacer con todas las garantías con el núcleo más cercano, en el contexto de la crisis sanitaria. La posibilidad de alquilar una embarcación de ocho personas al completo, es una opción cada vez más demandada entre los consumidores.
La compañía concentra toda su actividad en esta disciplina en las bases de Llavorsí-Pirineos y el nuevo centro de UR Pirineos en Murillo de Gállego. De hecho, el primero es la base central de RocRoi en pleno Noguera Pallaresa, uno de los mejores ríos del sur de Europa para la práctica de esta actividad.
Entre los diferentes sectores del río en el que ofrecen la actividad se encuentran los que van desde Llavorsí a Rialp (14 km), a Moleta (5 km), a Montardit (20 km), a Sort (16 km), a Gulleri (8 km) y a Collegats (52 km), además del que va de Arboló a Collegats (14 km). Algunos de estos trayectos, ofrecen servicios adicionales de gastronomía tradicional de la zona en una borda pallaresa.
A los trayectos y servicios disponibles en tierras catalanes hay que sumarles los del Río Gállego, uno de los principales afluentes del Ebro, dónde el nuevo centro de RocRoi también organiza descensos en rafting. Ubicado en el Reino de los Mallos, en el Prepirineo aragonés, además de rafting ofrece otras actividades como descenso en barrancos, en hidrospeed y en canoa, deportes de montaña, escalada y senderismo, entre otros.